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Historia del toro de Grazalema
Historia del toro de Grazalema - Anécdotas
Indice del artículo
Historia del toro de Grazalema
El Toro de Cuerda de la Virgen del Carmen
El Toro de Cuerda y su Tradición
Anécdotas
Cambios
Forma de correr El Toro de Cuerda
Todas las páginas

Historia del toro de GrazalemaSe cuenta que la primera salida del “toro de cuerda” se efectuaba hasta el atrio de la iglesia de San José y se ofrecía a la Virgen del Carmen rezando ”Salves”; también se cuenta que el mozo que tocara los cuernos del toro con vino tendría asegurado llevar la procesión el año siguiente; la cuerda o maroma del toro se fabricaba con esparto, cuya labor realizaban todos los años artesanos del pueblo, debido a que su utilidad no garantizaba otro año más de uso; se cuenta también una anécdota de una pareja de recién casados, resultando que el toro rompió la cuerda y se metió en una casa de complicado acceso, donde una pareja de novios festejaba su primera noche de bodas, tal fue la confusión, que la novia se encerró en su alcoba y el novio subió a la cámara o soberado, donde permanecieron toda la noche hasta la luz del día, que pudieron sacar el toro a la vía publica.

Historia del toro de GrazalemaLas mujeres no participaban en la fiesta. Desde los balcones y ventanas presenciaban como los hombres se arrimaban y corrían al animal. Ellos no luchaban con el toro, sino simplemente corrían junto a él, tratando de acercarse y tocarle el cuerpo o los cuernos, poniéndose frente a la bestia, enrabiándola, llamándola, haciéndole pantomimas para que embistiera. Era, en definitiva, un constante derroche de valor y coraje.

La fiesta terminaba cuando el animal estaba totalmente agotado. De forma metafórica, se podría decir que su fuerza, su poder, quedaban ese día en cada hombre del pueblo. Mientras que el hombre se animalizaba, la bestia se humanizaba. Sin bravura ni fuerza, el toro dejaba de ser toro para convertirse en un animal manso; con esta muerte simbólica acababa la fiesta y el animal se conducía al matadero para su sacrificio. En contraste con el clima de solidaridad religiosa y de orden moral que predominaba el domingo, el lunes dominaba el caos; la gente corría en todas las direcciones persiguiendo a un animal. Ese día no había normas ni leyes y lo que imperaba era la libertada y voluntad del pueblo. La Virgen representaba el amor maternal, unidad, pureza, y era parte de un mundo de dimensión espiritual. Pero el toro simbolizaba fuerza, vigor sexual, bravura y era parte de un mundo material, en relación con la dimensión física, corporal del hombre. La fiesta de la Virgen era una celebración de lo femenino; la del toro de lo masculino. De forma figurativa se podía decir que la ecuación parecía ser entre la Virgen y la mujer, y entre el hombre y el toro.

Historia del toro de GrazalemaLa Virgen obedecía a una serie de signos sociales (i.e., iglesia, religión, católica, cura) pero no el toro. El animal no estaba vinculado a ninguna organización social de la comunidad; sus propiedades formales no eran coherentes con la estructura social. A pesar de ello, era el toro y no la virgen quien identificaba el pueblo; era el toro abstracto, metafórico, quien persistía como símbolo dominante de la cultura local. Idealmente, podíamos decir que al comienzo de la fiesta, un pueblo de bueyes luchaba y corría a un toro; al término de la misma, un pueblo de hombres – toros sometía a un buey a un orden muy parecido al social y humano. Mientras que el hombre se naturalizaba, la naturaleza se humanizaba.

 

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